lo sabes bien
me quedé en el páramo
velando las flores
que nunca puse
en la tumba de un tal
Juan Preciado
Y ahí andaba
cuando llegó la explosión
O implosión
no sabré hacia donde
me impulsó la luz verdinegra
de tus ojos
hacia afuera
al dulce tacto de tus manos
párvulas
atrapando mi irremisible caída
hacia adentro
compeliendo mi alma
oscura
a buscar refugio en tu luz
Mientras tu ausencia
plagia mis versos
recuerdo que no habrá fotos
para recordarte
Porque mientras te vas
el multiverso ha cedido
y ya todo encaja
en tres dimensiones
en una única dirección
Y esta es
la noche sin retorno
cenaré flor de loto
para asumir tu olvido