Amigas

Este es el tiempo
he razonado las múltiples variables
y he demostrado las hipótesis
ya no queda azar probable
he entendido las señales
y son certeras
son reales

Apenas una mano me basta
y me sobra
Estas son las razones
y las esperanzas
son la fuente de mi existencia
porque sin ellas nada es posible
y no saben que dependo de su mirada
o de su ausencia
o de su voz
o de su presencia

No hay vínculos
no hay promesas
no hay tiempos
solo insistencia
perfiles bajos, tensiones neutras

En esas noches que abundan
en romper la luna
busco la razón
que encienda la vela
que ilumine el camino
que alumbre el alma
en dirección correcta
y entiendo que siempre
he de mirar las estrellas
que conforman mi cielo
de amigas ciertas

No siempre estoy
no siempre es cierto
si nunca fui
no es ahora el tiempo
de entender que sois
lo mejor que tengo

Ausencia y Septiembre

Te añoro, dije
no contestó, bueno,
habló de páginas, habló de ciclos
no entendió nada

La luna pariendo estrellas
sonreía cruel, paciente
maestra de esperas infelices
de promesas rotas
acarició mis lágrimas
para hacerme sentir un hombre
y me acompañó en la aurora
que chillaba su nombre y su ausencia
y golpeaba mi memoria
en charcos de melancolía
en una fuga sin sin escapatoria
prisionera de tantas carencias

Te añoro, dije
y entendí en ese instante
la profunda levedad
del amor eterno
de la insaciable lascivia
de los lunares
que conforman el mapa
de un tesoro
que nunca será mio

Nada

Nada.
No es cierto
no preguntes, te mentirán
arma tu pistola
tu arco
tu escopeta
y mátalos, aniquílalos
te están mintiendo
lo sabes
y esperas
¿a qué?
no hay salida,
no es una laberinto,
es una trampa
entiéndelo
es tarde
abre fuego
hazte camino
no hagas prisioneros,
son una carga
y no hay sitio
en tu barca

Ya no espero
tu misericordia
tu falaz mentira
tu eterna espera
salgo a la calle
y estoy solo
como siempre
y te nombro
y te olvido
y te guardo
en un corazón roto
para vivir
la vida que me queda

Desespero tus palabras
pero no espero tu respuesta
y me visto de mañana
para sonreir la noche
que sostiene mi esperanza