Septiembre

"Arderás en el infierno"
Lo oí muchas veces, demasiadas 
Quizás era yo mismo
Quien lo decía 
Pero era un broma 
Siempre supe que era una broma
O una excusa para que
No agotara el aforo
Del puto infierno tan deseado
Por toda la caterva de santones
Que conforman esta inerme
Postmodernidad moral
De patéticos tardoadolescentes
Que pretenden quebrar el orden
Con palabras de cristal de azúcar
Tan falsas como sus intenciones 
Dibujadas en carmín prostituido
En líquidas pantallas sociales

"Arderás en el infierno" 
Dónde mejor arder
Pero ya está lleno
Y frío, demasiado frío 
Lleno de palabras tan Vacías 
Como los ojos que lloran
Cuando descubren
Que el amor es un invento
De la soledad
Y que cuando se acaban las drogas 
La realidad te empuja a vivir
Despojado de la máscara ridicula
De esa sonrisa trasnochada 

Reincidente

Mientras espero
agazapado en un rincón
convertido en un espejo roto
donde dibujo las flores
que nunca te compré
recito de memoria las palabras
que me enseñaste
cuando te explicaba
que tan solo soy un poeta
maltrecho de vida y deseo

No le hice caso al eterno perdedor
lo intenté, no era eso
hazlo, me dijo en varias ocasiones
y no lo hice
o lo hice tarde
ahora solo soy un reflejo
cóncavo o convexo
tu decides
sobre las sombras
de eso que llamamos tiempo
sobre una línea unívoca
que avanza sin freno

Rotas las defensas
el enemigo avanza inexorable
y se que estas palabras
no llegarán a tiempo
nunca llegan a tiempo
nunca llegan
nunca
moriré en esta trinchera
ahogado en el lodo
mojado de lamentos
ahogado en el veneno
gaseoso de los silencios
que envenenaron
el humilde tálamo
que me ofreciste en secreto

La ciudad se enciende
mientras paseo
toda la tristeza que convoca
tu recuerdo
"no lo intentes" dijo
y yo no supe entenderlo

7/9

Sabes que no iré esta noche
pronto llegarán los soldados 
y requisarán mis pertenencias
volveré a ser un esclavo
arrastrando las cadenas 
que tanto estimo
mientras
tu seguirás despierta
leyendo los libros 
que escribieron poetas
que fueron amados por mi

Recito por última vez
tu nombre
para sentir que es el tiempo
de la desdicha
de no haber sabido conjugar
los verbos que invocaran
la libertad que ansío 

Dejo siempre la puerta abierta 
no quiero que rompan 
las bisagras que me hacen sentir 
único 
y que tengo una llave 
que me separa de este mundo
inhóspito 
Se que esta es la última noche
que te escribo 
porque ha empezado una guerra
y no tengo armas para 
entender que la victoria
no depende de lo que escribo