Sangre en la luna

Será pronto
que cambie la luna de nuevo
me pides sangre
pero solo tengo palabras
mis venas repletas de versos
son incapaces de sangrar
para ti
huecas como esta noche
fundida en negro

También el viento ha cambiado
susurra un otoño frío
que llega para arruinar mis ganas
de abrazar el mar
de volver a tu calma intensa
y me vuelvo invasor o bárbaro
para destruir el templo
y se perderán los sagrados
útiles de los sacerdotes
para siempre, serán leyenda
que contarán los fieles
que sobrevivan a los progroms

Será pronto
siempre lo es
no sé de que me asusto
debería comprender
que la piedra nunca llegará
a la cima
que las alas impostadas
de cera y plumas muertas
habrían de arder
en los abrazos
que robé
en tu alcoba
y este vuelo
no tenía destino
tan solo era
una ilusión tardía
para un corazón cobarde


viernes 22:51

Malos tiempos para la lírica
no voy a mentirte
no me apetece escribir
no sé por donde empezar
pero es inevitable
es necesario
replantear las razones
del vacío, rellenar la hoja
cubrir el expediente
siempre se empieza así
dibujando con palabras
sentimientos
intentando apresarlos
aplastarlos contra la hoja
en blanco

Sigo aquí, cada vez
más dispuesto a continuar
extendiendo mi mal humor
para reducirlo a la nada
donde debe estar
de donde no debe salir
y así
engarzo tu voz
de cristal tallado
la sujeto firme
con tu risa
sincera y clara
al olor de tu cuerpo
caliente y salado
para elaborar collares
donde atrapar tu recuerdo
y recuperar la calma
que tanto quiero

Y desde ese lazo recordado
recupero la dicha
como un sortilegio
mientras acabo mis palabras
renovado
entendiendo que a través
de tu presencia remota
puedo volver a ser poeta
vuelve la magia
a estos versos
ciertos de ti
llenos de esperanza
quizá no eran los tiempos
quizá lo malo solo era
ese momento

Barroco intrascendente

Ornados de vocablos pretenciosos
quizá demasiado rebuscado
los versos ahora buscan sorprender
o maquillar la pobreza de ideas
seducido por la belleza de la rima
o, tal vez, la cadencia, apuras
en cultismos tu vacía verdad
ante tanta miseria, ante tanta
ignorancia

Donde era joya la palabra
ahora abunda la bisutería
fina y elegante, pero chapa al cabo
brillantes cuentas con las que
engañar al ojo y la avaricia
fomentar la ilusión
de quien solo hurga al vano
afán de la oportunidad
de aquello duros a cuatro pesetas

Sordos al albur de estos tiempos
inanes cuerpos que deciden
sobre luminosas pantallas
ajenos a una realidad que sobrepasa
cualquier renglón de sus falacias
escritas desde la mentira encubierta
de avatares dispersos, de mortuorias máscaras
de mortajas para envolver su desespero

Caduco en mi esperanza, se que el tiempo
me hallará verdadero en esta tristeza
y me buscareis cuando tanto evento
hueco y distante sea tan solo recuerdo
de aquella vida pasada
cuando los bares eran vida
y la calle el lugar
donde aprender los versos