Entretiempo

Venus me mira
Cae la tarde 
Guiña traviesa
o
eso creo
pero,
Quizás sea la  bruma
Que transita el
Crepúsculo 
siempre es 
la primera
Aún no es noche 
Camino despacio 
Buscando donde empezar
aunque sepa que es tarde
o demasiado pronto
para beber
ese trago que limpie
las amenazas
que posicione mi alma
para recibir
la absolución

Sigo el sendero
que marca la noche
veo las muchachas
hermosas
que sonríen
a desconocidos
y entiendo
el pecado
de desear
Espero
asido a una barra
mientras leo
noticias o sucesos
y comprendo
que nadie va a venir
a salvarme
apuro un trago
y pido otro
es rutina
quizá
desesperanza

Salgo a fumar
adentro suena
música y voces
afuera silencio
y sigue mirándome
Venus
ahora brilla
ya no está sola
pero se destaca
en la sinfonía nocturna
y aprieta su luz
contra mi soledad
Llega la hora
de las mujeres
pero siempre
están acompañadas
y yo sigo bebiendo
y fumando
y escribiendo
en servilletas
los versos que
compren
un nuevo trago
o un beso

Llega la hora
fin de recorrido
apuro el trago
sobre el trapo
que limpia esta última barra
todos se han ido
celebro ser capaz
de recoger mis cosas
y emprender
el camino a mi cama
solitaria barca
que navegará
otra noche más
en rumbo de colisión
con la soledad

Venus vuelve a sonreir
mientras muere la noche
sabe que
postula
como postrera esperanza
de un amanecer
no deseado

Le miraba suave (palíndromo)

No era intención
Tan solo juego
Tan solo esperanza
De una sonrisa
Entre cafés y palabras
Siempre fue un juego
Hasta que el olvido
Relató su doctrina
De infinita ausencia
Y aburrió la gana
Y denostó la ilusión
Que propiciaba
La incógnita
Y hubo tiempo
Para decir las cosas
Que siempre callaste
Y de tanto esperar
Murieron las flores
En rencor de
No ser tomadas
Marchitas en soledad
De lluvias que nunca
Mojaron sus pétalos
Incendiarios

Tiempo pasado
Para estas palabras
Que componen tristezas
Donde hubieron ganas
Sin entender
Por qué tanto silencio
Por qué miedo
Si solo
El poeta
Le miraba suave

S/T

Siempre llevo un pañuelo
Blanco, de tela
En el bolsillo trasero 
Del pantalón
Nunca sabes que lágrimas 
Habrá que secar
Siempre saludo al entrar 
En cualquier sitio
Aunque sea nuevo
Aunque sea cotidiano
Siempre escucho
 a quien me habla
Quizás otro día sea yo
Quien busque consuelo
O conversación 
Agradezco y declino
Gentilmente cuando no 
Necesito lo que me ofrecen
Ser amable
Es
Casi una condena
Cuando te apetece
Partirle la cara
A tanto idiota
Mantener este equilibrio 
Supone un gasto
Necesario
Agotado entre silencios

Aunque 
Tal vez
Mañana
Decida
Que no merece la pena
Y por fin
Os mande a
La mierda
Donde seguramente 
Estaréis más a gusto